Para hablar de un tratamiento conducto, debemos repasar brevemente aspectos base, como la composición de los dientes y cómo evolucionan sus enfermedades, en particular, la conocida caries dental.

Como dijimos la principal enfermedad es la caries dental, ésta actúa destruyendo los tejidos y avanza paulatinamente en el siguiente orden:

1.- Destrucción del esmalte: este es el tejido más duro del cuerpo y es la capa superficial de un diente.  Es un proceso relativamente silencioso, sin presencia de dolor.

2.- Destrucción de la dentina: este el tejido donde se haya el color de nuestros dientes, es muy sensible a los estímulos como el frío y el calor.  En esta etapa tenemos síntomas más evidentes y sensitivos.  ¡Dolor!

3.- Penetración en la pulpa o nervio: esta es la etapa más compleja, dolor intenso y prolongado y que suele tener 2 vías de solución: una endodoncia, también conocida como tratamiento conducto o la extracción del diente.

Adicionalmente, la exposición de la pulpa podría provocarse por una fractura dental.  Las fracturas suelen ocasionarse al comer alimentos de consistencia muy dura o al hacer mal uso de los dientes (hacer palanca), y en casos más extremos, en caso de accidentes.

Cabe destacar que en cada uno de los pasos mencionados anteriormente, hay tratamientos específicos para salvar el diente, siendo el tratamiento conducto, la última instancia para no perderlo.

El tratamiento conducto se resumen en tres etapas:

1.- Trepanación: esta es la etapa inicial, con un instrumental se retira el nervio dentario. (ver imagen superior)

2.- Limpieza y preparación del conducto: con unas “limas” se limpia y amplia el conducto. 

3.- Sellado del conducto: este se realiza con un material conocido como “gutapercha endodóntica” y es la última etapa del procedimiento.

Como dato relevante es indicar que la duración de un tratamiento conducto es relativa, y obedece al daño que tenga el diente, sin embargo, el rango común es de entre 1 a 2 sesiones.

Dado que la caries o la fractura dental provocó un daño en la estructura del diente, una vez realizado el tratamiento conducto, se debe proceder con la rehabilitación, esta puede ser una simple tapadura o en el caso de mayor destrucción una corona dental.

Para finalizar queremos enfatizar en qué los dientes cumplen funciones masticatorias, deglutívas y fonéticas. Por tanto, la importancia de salvar un diente, se asocia primero que todo a un factor fundamental como lo es la salud y finalmente, una sonrisa sana, que representa juventud y vitalidad

Si quieres tener una evaluación sin costo, puedes llamarnos al 2-6469 1009 o bien pincha aquí y agenda en línea.